El salario mínimo no alcanza a las familias para comer, y la razón por la que no ha cambiado es la falta de voluntad política.
Ordenar el gasto para tener finanzas sanas y competitividad fiscal y no al endeudamiento irresponsable.
Para que la paz regrese al país cambiar de estrategia y poner el acento en la prevención, a través de más inteligencia.
Crear una nueva Secretaría de Seguridad Ciudadana, además de mejorar los cuerpos policiales y cumplir con lo que ya establece la ley sobre su certificación y profesionalización.
Sobre la reforma educativa, hacer una inversión seria en la formación y capacitación, y con un nuevo modelo educativo que permita la transición de la economía de la manufactura a la economía del conocimiento
Lograr un sistema de desarrollo social integral coordinado, mucho más eficiente y transparente en el gasto público, que permita avanzar hacia el ejercicio universal de los derechos sociales y el bienestar económico de las y los mexicanos, evitando la dispersión de programas a través de un Catálogo Nacional de Programas, Infraestructura y Servicios Sociales
Asignar de manera más eficiente el gasto para el desarrollo económico y social, eliminando duplicidades en los apoyos, dar una mejor atención a la ciudadanía y desarrollar el potencial de los mexicanos.
Hacer equipo con el próximo alcalde de Mérida, Yucatán, para que ningún joven se quede sin estudiar por falta de recursos.
Instalar a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) en San Luis Potosí, para reactivar la economía del estado y evitar el centralismo.
Aumentar el salario de los soldados y marinos.